martes, 22 de junio de 2010

ASUNCIÓN OLIVA PORTOLÉS: LA RECUPERACIÓN DE UNA VOZ MARGINADA: DORIA SHAFIK, FEMINISTA EGIPCIA


Me llamó la atención el hecho de que muchas de las teóricas que estudian desde hace unos veinte años el feminismo en el país del Nilo fueran muy críticas con ella por la preponderancia de lo que consideran las influencias occidentales que recibió. Estas autoras emplean un discurso en el que se contrapone “Occidente” a “Oriente” o al “Islam”, dicotomías que, a mi modo de ver, sólo sirven para dividir y confundir. (pp.11- 12)

En el momento histórico en el que vivimos, la cuestión de las relaciones entre el Islam y las mujeres es de plena actualidad. El auge del fundamentalismo islámico en muchos países hace que las mujeres se consideren el máximo exponente de la “identidad” de su cultura y se les exija “cubrirse” (velo, niquab, chador, burka) para ocultarla, se les nieguen sus derechos, se las supedite a los maridos, se permita la poligamia, se considere un “rasgo cultural” casar a las mujeres desde niñas con hombres mayores que ellas, por no hablar de una costumbre que, pese al trabajo de muchas mujeres en Egipto y el resto de África, está todavía muy extendida, la clitoridectomía, a la que ya he aludido. En los países en los que rige la sharia o ley islámica se les infligen castigos como la lapidación a “adúlteras” o las palizas dadas a las mujeres que se suponen “prostitutas” por los varones de su familia (un caso recientemente ocurrido en el Norte de Pakistán, donde el Gobierno central ha consentido la implantación de la sharia). Por otra parte, en los países a los que los musulmanes han emigrado, tanto en los EE.UU. como en los países europeos y en Australia se producen enfrentamientos sobre el respeto a los derechos culturales de las minorías, que afectan muy especialmente a las mujeres.
Por todas estas razones parece urgente la recuperación de una voz como la de Doria Shafik para no olvidar el hecho de que las mujeres han luchado por sus derechos en Egipto, pero también en Turquía, en la Persia del Sha y en el actual Irán, así como en otros países musulmanes desde mediados del siglo XIX y durante todo el siglo XX, sin renegar de la misma tradición que hoy se lo prohíbe terminantemente. Para saber también que han existido otras formas de entender el Islam que la del fundamentalismo. Y para subrayar que el feminismo es un movimiento que lucha por la emancipación de todas las mujeres y que, pese a lo que hoy se inculca en muchas mujeres musulmanas, la lucha por la liberación de las mujeres forma parte también de su cultura.
Quiero creer que Doria Shafik estaría de acuerdo con ello. (pp. 150-151)


Oliva Portolés, Asunción (2010), La recuperación de una voz marginada: Doria Shafik, feminista egipcia, Madrid, Huerga y Fierro, 156 pp. ISBN: 978-84-8374-823-7.